Desde hace un tiempo, el municipio trabaja en mejorar el tránsito local y para ello, viene desarrollando un plan integral de señalización y demarcación horizontal y vertical, para las zonas más álgidas y con mayor circulación.
Estos proyectos, constan de la instalación de reductores de velocidad, que aportan y aportarán más organización y una mejor calidad de transitabilidad, siempre con el objetivo de cuidar a la comunidad.
“En lo que respecta a ‘lomos de burros’, se identificaron los espacios, no sólo por los pedidos de los ciudadanos, sino también por un relevamiento que hicieron los inspectores. Comenzamos primero con la señalización y después, continuamos con la etapa de ejecución”, habían anticipado desde el Área de Tránsito.
Días atrás, se ejecutaron tres nuevos reductores, en distintos sectores de la ciudad: Uno en calle San Martín, a poco de su intersección con Viena; otro en Elisa Damiano, a metros del cruce de esta arteria con San Martín; y otro en Candioti al 600, antes de llegar a la esquina con calle Entre Ríos.
Cabe destacar que estas tareas son llevadas a cabo de manera conjunta entre el Departamento de Tránsito y el Área de Servicios Públicos, la cual se encarga de construir los “lomos de burro”.
