Desde hace alrededor de dos meses, el Área Municipal de Medio Ambiente viene trabajando en la programación de un corredor biológico, que comienza en calle Sarmiento y se extiende a lo largo de la Av. Libertad hasta los predios de la Cooperativa Agrícola.
Son aproximadamente entre 1000 y 1100 metros que se venían forestando. Hasta el momento, se habían terminado distintos tipos de montes, hasta calle Palermo, plantando unos 160 árboles de diferentes especies.
“Comenzamos con la otra parte, que son unos 400 metros, desde la calle Palermo hasta una quinta que hay en el lugar, cerca de la Cooperativa. En esos 400 metros, decidimos plantar lapachos. Es una planta importante, nativa del noroeste y norte argentino. Y cada uno de ellos está plantado a una distancia de ocho metros. Son 50 lapachos en forma lineal para cubrir los 400 metros”, comenzó manifestando el coordinador del área, Mario Rosso.
“Eso se comenzó el viernes, con la plantación de entre 25 y 30 lapachos. El sábado y hoy –por el lunes- también, nos encontramos con el 60% de esa plantación rota, cortada por la mitad. Es decir, la especie no sirve más. Es un acto de vandalismo que hace mucho mal. No entendimos nada. Esto es propio de la incultura. Pero bueno, lo que vamos a hacer ahora es reemplazarlos, poner nuevos y completar esos 400 metros”, se lamentó.
“Le pedimos a los vecinos que miren, se fijen y estén lo más atentos que puedan. Ya en otra plantación anterior, que se había hecho desde la calle Palermo hacia el norte, nos habían robado algunos. Inclusive también habían roto, pero no en esta cantidad como ahora. Un daño a una planta muy linda, nuestra, que al romperla así, no sirve más”, puntualizó el ingeniero.
Una pérdida importante
“Nosotros le hicimos un trabajo especial a esa planta, porque venía con unos recipientes, los cortamos y la enterramos con los mismos para que no se rompa el pan de tierra. Y como son plantas sensibles a los fríos, le habíamos colocado arriba una malla anti helada. Cada una de ellas estaba tapada, lo que nos significó un trabajo bastante lento y cuidado. Y encontrarnos hoy con que el 60% de lo que plantamos estaba roto por la mitad, fue, para mí, nefasto”, señaló el funcionario.
“Cada lapacho tiene un costo importante y todo eso es pérdida. Pérdida económica y pérdida medioambiental”, acotó.
Para cerrar, Rosso afirmó: “Ese corredor es una proyección a, más o menos, ocho, diez años. Va a estar listo como todo el sector que después enlaza con el anfiteatro. Hay una cuestión pensada, desde la calle Sarmiento hasta prácticamente el Cementerio. Da toda una curva y son cinco kilómetros, con un ancho de casi 50 metros. Son doce hectáreas que tendrá El Trébol, con una reserva forestal y un pulmón que abrazaría a toda la parte este y sur de la ciudad”.
