«Bigote» Giordano en Las Malvinas – «Bigote Giordano corrió los 42 kilómetros de las Islas Malvinas. Cumplió un gran sueño. Se emocionó al cruzar la meta. El viernes en Muy Pancho contará más de su experiencia.
Por Francisco Díaz de Azevedo Héctor Juan Giordano tiene 66 años y una buena historia que contar. Humilde, sin querer dar muchos detalles se emociona.
Es que «Bigote» cumple sueños en una edad en que muchos creen que la vida está de sobra. El tipo los hace realidad en silenció, pero los ecos de sus días son mas fuertes que las andanzas mudas al viento.
En noviembre del año pasado había podido cumplir la hazaña de completar los 42 kilómetros de New York. Se le había frustado en el año 2012, por inconvenientes climáticos y esos huracanes que azotan los Estados Unidos con nombres de mujer. Pero en el año 2013 lo logró.
Ahora fue un poco más lejos. Más cerca en distancia, pero más lejos con el corazón.
Corrió en Malvinas, en Puerto Argentino y cruzó la meta de los 42 kilómetros entre lágrimas.
El viernes en la apertura de emisión Muy Pancho contará más de su experiencia.
Formó parte del 25% de argentinos que corrió la carrera. Eran 15 en total, y Héctor fue el único santafesino en hacerla. Fue el 23 de marzo pasado. La temperatura era de 6 grados y había vientos de 32 kilómetros.
Héctor le puso 4 horas y 39 minutos. Llegó 37ª entre 60 participantes. Fue el más veterano de la carrera. Al cruzar la línea de llegada lagrimeó. «Sentí alivio, no tenía la opción de abandonar, no en ese lugar», le dijo a este medio.
Giordano estuvo siete días en Malvinas. Fue recibido por el Gobernador y muy bien tratado por los Kelpers. «El respeto es total. No hubo ni una bandera inglesa en la prueba, para evitar susceptibilidades. Deberíamos aprender de su educación», señaló.
Tras el maratón, «Bigote» recorrió Malvinas. Caminó 80 kilómetros con un ex combatiente que también participó de la prueba. «Pisé el cementerio argentino en «Darwin». Estuve 10 minutos y me tuve que ir. No soporté ver el lecho de tantos jóvenes muertos», dijo con gesto adusto.
«Bigote» lo logró otra vez. Esta vez en suelo sagrado. Corrió, llegó y nunca abandonó. A los 66 años, sabe que no tiene opción de no llegar a esa meta. Y mucho menos, en el lugar donde muchos héroes cayeron por la bandera de su patria.
La bandera que «Bigote» lleva adentro, por más que las guerras no se entiendan, por más que el corazón siga sangrando, 32 años después.
