Debate – Habla Gerardo Debernardo. Si bien algunos hablan de medidas ecológicas, éste apunta a intereses económicos y políticos. El debate político en el Senado de la provincia sobre qué distancias habría que respetar para no fumigar con agroquímicos en cercanías de los ejidos urbanos no avanza. Las sucesivas reuniones que los legisladores mantuvieron con ambientalistas, productores y otros actores vinculados al tema aún no se materializó en uno o más dictámenes que aceleren la llegada del proyecto al recinto de la Cámara alta.
Ni bien los rumores llegaron a la ciudad, dialogamos con Gerardo De Bernardo, quién posee una histórica empresa de fumigaciones aéreas en El Trébol.
«Está complicada la situación. Para mí es una cuestión político – económico y por ese motivo quieren prohibir el avión y no los terrestres», apuntó De Bernardo, cambiando el objetivo de los motivos por los que se prohibiría la fumigación aérea en la provincia.
De Bernardo también dijo: «Hay etapas en las que no podés reemplazar el avión. En épocas llovedoras por ejemplo, en campos bajos, sólo entra un avión y los terrestres no pueden avanzar».
El propietario de «Fumigaciones aéreas Gerardo», además señaló: «Con respecto a la contaminación, no es como se dice. Contamina igual un líquido tirado desde un avión que desde un «terrestre. Si uno respeta las medidas, no pasa nada. Yo hace 30 años que trabajo en esto. La ley está bien hecha, nosotros podemos fumigar a 800 metros del punto cero de la ciudad. Hay que respetar los vientos y nada más».
Convivencia con los agroquímicos
«Yo estoy en contacto con líquidos y mi piloto hace 30 años que lo está y no tenemos problemas. No hay un piloto contaminado en Fuerza Aerea desde hace 80 años a la fecha. Habría que usar máscaras, lo admito, pero es bravo estar 8 horas con máscaras volando sobre los campos. Nosotros convivimos en el avión con el producto y lo olemos, pero no nos pasa nada», dijo De Bernardo.
Movilización
«Hace 15 días viajamos a la Legislatura a Santa Fe. Nos juntamos unos 700 pilotos de Santa Fe para llevarle la preocupación a los diputados y senadores. Nos dijeron que lo iban a analizar. Llegamos pruebas de que no hay contaminación por la fumigación de un avión».
Sobre la actualidad, Gerardo señaló: «Hoy por hoy trabajo normalmente en la región respetando el punto cero de cada localidad. En todos lados es de 800 metros, excepto en Piamonte. De esta localidad me llegó hace una semana un gráfico nuevo donde ampliaron el punto cero de los 800 metros a 1200 y 1500 de acuerdo al punto cardinal. Creo que está bien, no es ninguna locura, es fumigar a 15 cuadras del pueblo. En María Juana se prohibió, pero allá no hay fumigaciones aéreas».
Vialidad y las banquinas
Desde Vialidad, el Ingeniero Bertero, le restó importancia al tema. Sólo dijo: «Nosotros nos detuvimos en la prohibición de los espacios que están a la vera de las rutas. Sobre el otro tema, no tenemos nada en concreto, se está analizando y viendo. Sí pusimos énfasis en que no se fumigue en las banquinas de los corredores provinciales».
En María Juana
Las autoridades de esta localidad del sur del departamento Castellanos dictaron ordenanzas que apuntan a mejorar el ambiente y la calidad de vida de los ciudadanos. Una de ellas, referida al uso de agroquímicos, prohíbe la aplicación aérea de cualquier tipo de productos químicos agrarios dentro de toda la exten