Los festejos patronales de la ciudad fueron un éxito. El clima, la variedad de espectáculos y la concurrencia hicieron que los dos días de fiesta se transformaran en un puinto de encuentro de miles de personas.
La Plaza San Martín se llenó dos veces. Porque con la llegada del sol y el cese del viento, el viernes hubo fiesta grande.
Entre la Procesión, la exposición en la Parroquia, que cumplía 125 años, la bendición de los vehículos y la misa, hubo una enorme muestra de artesanos que ocuparon las calles Rosario y san Lorenzo abrazando a la plaza. 
El sector, estuvo lleno de juegos y entretenimientos infantiles, que arrancaron la sonrisa de los más pequeños.
Y luego llegó el turno de la música.
La gente no se hizo esperar para copar el anfiteatro buscando las propuestas genuinas locales y las que venían de afuera. Hubo diferentes estilos y muy buenas perfomances. 
El viernes desfilaron la nueva figura zonal ”Jose Pujol y su banda” que cautivó a la concurrencia con covers pop y bandas como La Oreja de Van Gogh y 4 Non Blondes entre otros. «Pachino» Fredes tuvo su actuación coreada por la multitud y el cierre fue con Hugo y el grupo Family, que nunca le falla a una platea sedienta de cumbia. 
El domingo, el clima aún fue mejor. Al mediodía brilló el sol y desde las 15 hs. nuevamente los artesanos coparon la parada en la Plaza y sobre el escenario llegaron “Morena Roldán y su Grupo” con una banda que lució muy ajustada y un repertorio muy cuidado; un impactante show de la “Depresiva Bipolar”, que presentó temas propios que formarán el primer disco llamado “De chico tuve un sueño” y el final con Mario Pereyra, que cumplió el compromiso que el clima no permitió en los carnavales.
Mientras sonaban los espectáculos, en diferentes puntos de la plaza y del Club san Lorenzo se desarrollaron actividades y fundamentalmente, mucha diversión para los niños.
Hubo festejo del bueno y popular, con un mix perfecto de estrellas locales y regionales, que hicieron que la ciudad baile y se divierta.
