A bordo del buggy 333, la experimentada francesa Isabelle Patissier volverá a competir en el rally con su marido, Thierry Delli Zotti, como navegante.

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Al Dakar, con su marido de copiloto – Tras conocer a Isabelle en la edición de 2004, comenzaron una relación de piloto-copiloto que se transformó, en poco tiempo, en una del tipo marido y mujer. Una competencia desgastante, larga, extrema, como el Dakar pone a prueba no sólo a máquinas sino también a los pilotos y, cuando las cosas se ponen complicadas, a su vínculo con los navegantes. Las duplas –en el caso de la categoría autos- pasan más de medio día metidos en el habitáculo durante dos semanas, y están obligadas a tomar miles de decisiones a lo largo de la carrera. ¿Será una ventaja o una desventaja la de francesa Isabelle Patissier, quien correrá otra vez junto a su marido como copiloto?

Con el número 333, Patissier correrá el Dakar acompañada por su marido, Thierry Delli Zotti, a bordo de un buggy. La doble campeona del mundo de escalada corrió varias veces el rally más difícil del mundo, con debut en 2002. Su navegante cuenta con la experiencia de haber competido en 24 Dakar para marcas como Mitsubishi, Toyota y Nissan.

Tras conocer a Isabelle en la edición de 2004, comenzaron una relación de piloto-copiloto que se transformó, en poco tiempo, en una del tipo marido y mujer. Hoy ambos corren en su propia escudería patrocinada por Hope Funds, una compañía privada de inversiones. Fueron presentados ante la prensa esta tarde en La Stampa, Recoleta.

Fuente: Clarín.com

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