Se mudaron a un sitio más seco para huir del lodo que caerá durante su rescate.

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Los mineros abandonan el refugio para protegerse del agua y el barro – Donde se encontraban, la alta humedad y calor los obligaba a permanecer semidesnudos y soportando temperaturas de más de 30 grados. Tras 25 días confinados en las entrañas de la montaña, los 33 mineros chilenos decidieron ayer abandonar lo que hasta entonces fue su refugio y hogar . Con la aprobación de los jefes del operativo de rescate mudaron su improvisado albergue a un lugar más seco y seguro.

Donde se encontraban, la alta humedad y calor los obligaba a permanecer semidesnudos y soportando temperaturas de más de 30 grados.

Según pudo saber Clarín , se mudaron a otro sector de la galería, pero que no distaría más de 25 metros del campamento anterior . En el nuevo sitio instalaron las camas e insumos nuevos que recibieron.

«Estuvieron buscando los sectores secos dentro de la mina. Están muy organizados y tomaron la decisión de moverse», confirmó Jorge Sanhueza, uno de los jefes del operativo.

La decisión contó con el aval oficial. El ministro de Salud, Jaime Mañalich, informó que cuando la sonda alcance el refugio de los mineros caerá mucha agua y lodo al sitio . «Necesariamente íbamos a tener que cambiarlos de lugar, de manera que concordamos con ellos en l a conveniencia de explorar un poco más arriba «, dijo.

Para cuando fueron descubiertos, los mineros presentaban una aguda deshidratación y habían perdido entre 10 y 15 kilos de peso. «La deshidratación ya fue superada», aseguran los responsables médicos del operativo. Sin embargo, las condiciones de vida adentro de la mina siguen siendo muy duras. Ahora la mayor preocupación es que no decaiga su estado de ánimo ante la larga espera.

Según informó la intendenta de la región de Atacama, Ximena Matas, en las últimas 24 horas se enviaron 74 ‘palomas’, los tubos en los que se les baja los suministros a los mineros. «Ya logramos mandarles 12 camas inflables . Mejoramos la eficiencia del envío, pero el sistema aún es lento». Para hoy los mineros contarían con las 33 camas necesarias.

Esto forma parte del operativo para mejorar, dentro de lo posible, la vida dentro de la mina. La comida es de una importancia vital. «Hoy pudimos mandarles sandwiches y yogur, y para el miércoles recibirán comida caliente . El primer menú ya está siendo planeado y preparado. Cuando les comunicamos la noticia se pusieron a gritar de emoción», agregó Matas.

Los médicos y psicólogos mantienen una conversación diaria con los mineros para evaluar su condición emocional. «Podemos decir que se encuentran en mejor estado», aseguró uno de los especialistas.

Ayer se conoció la renuncia de Raúl Martinez, secretario de Salud de la region de Atacama, tras las críticas que soporta desde el derrumbe de la mina. E l funcionario fue quien aprobó la reapertura de la mina San José tras un accidente el 3 de julio . En el incidente, un minero sufrió la amputación de una pierna. Pero la mina fue reabierta ese mismo mes.

«Era lo mínimo que podía hacer», sostuvo Javier Castillo, uno de los líderes sindicales de los mineros de San José. El dirigente fue parte del contingente de trabajadores de la mina que exigen que la empresa siga abonando los sueldos de sus empleados. Desde el gobierno prometieron interceder en el conflicto, y hasta a ayudar en la reubicación de los nuevos desocupados. Pero sostuvieron que el Estado no se puede legalmente hacer cargo de sus salarios .

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